miércoles, 8 de abril de 2009

CACHORRA HEROÍNA- SIERRA DE LA VENTANA

Fuente: Diario La voz del pueblo (Tres Arroyos)
http://www.lavozdelpueblo.com.ar/interior.php?ar_id=38294

06/04/2009|En Sierra de la Ventana
Una perra logró salvar a una joven y a su abuela de un incendio
Los ladridos de Issi lograron despertar a primera hora de la madrugada a Larisa, de 16 años y su abuela Wiera de 83, cuando las llamas comenzaban a devorar la casa

Una pequeña perra de apenas cuatro meses de vida fue la heroína del día en Sierra de la Ventana, luego de que sus insistentes ladridos alertaran a una anciana y su nieta sobre el inicio de un devastador incendio, el que terminó con la destrucción total de su vivienda.
Una mezcla de sensaciones experimentó Wiera Stefaniec, de 83 años, sentada frente a lo que hasta hace pocas horas era su hogar de calle Calfucurá, a metros de la intersección con Tres Picos, en el Barrio San Bernardo.
Por un lado, la desolación por el esfuerzo y sacrificio que las llamas destruyeron en pocos minutos; por otro, el agradecimiento a la pequeña Issi, que con su lealtad permitió que ella y Larisa, de 16 años, resultaran ilesas de semejante siniestro. "Presentí toda la semana que algo iba a pasar, aunque no sabía qué. Vino mi hijo a visitarme desde Comodoro Rivadavia y cuando se fue seguía mal... no tenía paz", comentó Wiera.
El foco ígneo se desató sobre las 3 del domingo, en la habitación que ocupaba la adolescente, luego de que una vela tomara contacto con un elemento y se propagara.
"La prendió mi nieta. La puso en un plato en el piso y se acostó a dormir. Yo encerré a la perrita y, a eso de la una de la mañana, también me acosté", dijo la abuela, detallando lo sucedido y tratando de contener las lágrimas.
Expresó que escuchó los ladridos de la perra, situación que le causó confusión, ya que recordaba haberlo encerrado.
"Me levanté y pude ver fuego en la habitación contigua, donde estaba durmiendo mi nieta. Ahora que lo pienso, podría haber tirado una frazada y agua para apagar el incendio, pero la verdad es que no pude. Quise sacar algo y me sorprendió una lengua de fuego, entonces tuve que salir", manifestó la damnificada.
De inmediato, la abuela, su nieta e Issi abandonaron la vivienda y se pusieron a salvo de las llamas.
"Justo en ese momento llegó mi hija de trabajar, aunque debido a los nervios no recordaba el número de teléfono de los bomberos, por lo que pidió ayuda a los vecinos", recordó. (DIB).

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